Cartagena es, desde hace más de una década, una plataforma cultural internacional, y un destino musical, literario, cinematográfico y turístico del mundo. Está entre las cien ciudades del mundo que hay que conocer inexorablemente, ya no de manera pasiva sino también como escenario para los eventos culturales nacionales e internacionales.
Cartagena acaba de probar que las alianzas culturales son necesarias, benéficas, alternativas, y nos enriquecen mutuamente. La reciente puesta en escena de
Las bodas de Fígaro, coproducción del festival de Spoleto y el Cartagena Festival Internacional de Música, es un ejemplo exitoso de ello.
Giorgio Ferrara, director escénico de la ópera y director artístico del festival de Spoleto, alabó la calidad de los artistas colombianos y la pasión con que un festival joven y prestigioso como el de Cartagena asume el desafío de una colosal puesta en escena. Es el comienzo de una alianza entre las dos ciudades hermanadas.
El movimiento sinfónico cartagenero tiene una amplia y sostenida siembra, y la reciente creación de la Orquesta Sinfónica de Cartagena, por convocatoria pública con más de una veintena de talentos locales surgidos de experiencias exitosas en Comfenalco, Unibac, Colegio Inem, entre otros, es también el inicio de una apertura musical hacia adentro y hacia Colombia y el mundo.
Como bien lo señala la artífice del Cartagena Festival Internacional de Música, Julia Salvi, el talento musical local que interpreta con calidad la música tradicional también puede enriquecerse con la interpretación de la música clásica, e inclusive, el conocimiento integral de la música puede incidir en el desarrollo de la música tradicional y las fusiones que surgen en los formatos sinfónicos, jazzísticos y contemporáneos. El profesional de la música elige por vocación un destino, un arte y un oficio, y su instrumento es parte de su existencia como ser humano y músico. Es una elección que requiere de disciplina, voluntad, formación y pasión.
Apenas culmina el festival de música, y Cartagena se prepara para la nueva versión del Hay Festival Cartagena 2017, que convoca a un centenar de invitados no solo escritores, sino también investigadores e intelectuales, científicos y filósofos. Hay Festival es la fiesta y la conversación contemporánea más dinámica, divertida y ecléctica. Allí es posible conocer el espíritu de los poetas, novelistas y ensayistas, el pensamiento de los periodistas y artistas.
Cuando se pensó en una ciudad en el mundo que replicara la experiencia del festival de Gales, le preguntaron a García Márquez y a Carlos Fuentes, cuál ciudad postulaban ellos. Y no dudaron en decir al unísono: ¡Cartagena de Indias!
Ahora la ciudad es la plataforma cultural de Colombia para el mundo, pero también es la capital agendada por el mundo para compartir ideas, aventuras y utopías.
Cartagena abraza al mundo cultural